jueves, septiembre 07, 2006

Mi proclamación

Sí señores, vengo a decirles que no tengo nada que decir.

En estos casos debería sentirme bien por no tener nada que decir, pero llevo meses sin tener algo que decir, entonces como que me estoy preocupando por no tener nada que decir, será que he agotado todo lo que tenía que decir? lo he dicho todo?, creo que el hecho de no tener nada que decir no significa que realmente no tenga nada que decir, o tal vez sí, pero de todas maneras el no tener nada que decir me está comenzando a fastidiar, lo que me parece absurdo porque cuando tengo algo que decir suelo decir que no tengo nada que decir, y cuando digo que no tengo nada que decir es porque tengo algo que decir, sin embargo en este caso parece que realmente no tengo nada que decir, porque si quisiera decir algo lo podría decir, es más, lo digo ahora: algo, y sigo sin decir nada, lo que me preocupa pues evito decir que no tengo nada que decir, pero suelo no tener algo que decir, entonces si tengo algo que decir puedo perfectamente decirlo , pero en casos como este, en que no tengo nada que decir, la cosa se vuelve más compleja y espesa, porque al final, nadie tiene algo que decir, y cuando se cree que hay algo para decir, se dice y luego se desdice porque no era lo que uno quería decir, por lo que mejor no hay que decir que no se tiene nada que decir porque la gente desconfía y no te creen, y si uno dice que tiene algo que decir la gente espera la gran revelación de la vida, y te terminan diciendo que mejor no digas que tienes algo que decir porque no vale la pena, y no te escuchan y prefieren que digas que no tienes nada que decir, lo que de inmediato es contradictorio pues no les gusta escuchar que uno no tiene algo que decir.

He dicho.

1 comentario:

Anónimo dijo...

shuuuuuuuuu
la media volaíta



qué proceso neuronal haces???