
Es por esta razón que las pesadillas y la intranquilidad "interna" - si es que existe lo "interno" y lo "externo" - caen pesadamente sobre la inestable psiquis que se perturba frente a la más mínima afección, y vaya que este mundo no es más que afecciones diarias y constantes!, dejando al pobre sujeto desnudo, sentado en una cuneta, juntando las rodillas con los codos y dejando la cabeza en esa posición de no querer saber nada de sí ni de los otros.
¿culpables? puede que lo seamos.
¿omnipotentes? en ningún caso.
¿limitados? de todas maneras.
¿utópicos? un seductor proyecto cuya concreción ignoramos por completo.
¿seremos alguna vez humanos? ojalá lo supiera.
[hora real: 23:52]